viernes, 11 de noviembre de 2016

FRÍO CRISTAL...

     A cielo abierto, rodeada de soledad, busca el calor de un abrazo.

    Su vida ha sido muy dura, siempre sola, sin tener una caricia ni un gesto de cariño acompañado de calor humano. De institución en institución, no sabe lo que es un hogar. Su único delito ser pequeña y huérfana.

   Nunca se queja, pasa desapercibida, invisible para los demás, un número en un archivo olvidado.

   Ahora que la edad la ha liberado, sigue buscando en silencio, mientras tanto, abraza el calor frío de la bombilla, que un día iluminaba, daba calidez a la vida y que ahora, agotada como ella, la han abandonado.

  Hoy se siente aliviada, menos sola, aunque lo que reciba en su abrazo no sea calor humano.



                                                        Imagen : Oprisco

2 comentarios:

  1. Pilar nos presentas una historia en la cual tu protagonista ha vivido una vida con falta de cariño, tu bella frase inicial es un total resumen, ese buscar un abrazo, un aprecio. Y esa comparación de su vida con la vida de una simple bombilla me parece genial.
    Pilar has hecho un relato excelente, muy bello y lleno de sentimiento.
    Me ha gustado mucho.
    Besos.

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  2. Javier, totalmente de acuerdo con tu comentario. Hay niños en las instituciones donde reciben atenciones, pero a veces se olvidan de lo más importante, dar cariño.
    Muchas gracias por tan bello comentario.
    Besos apretados.

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