¡Ya no puedo más! ¡Se acabó! Sabes que entre nosotros siempre existió tolerancia y respeto. Que, a pesar de nuestras diferencias, luché muy duro por tu inclusión en círculos muy diferentes y logré que fueses aceptado por todos. Que, desde entonces, gozaste de los mismos derechos que los demás, siempre y cuando cumplieses unos mínimos códigos de convivencia.
Disculpé muchos de tus errores, pero, esta vez, llegaste demasiado lejos. Por tu culpa, nos pusieron a los dos de patitas en la calle.
Confundir los pies de mi jefe con un árbol donde aliviarte, fue algo imperdonable.
Relato publicado la IV semana de Julio en la web solidaria
Las palabras obligadas, regalo del Presidente de Uruguay Tabaré Vázquez @SCpresidenciauy
y por este orden son:
Tolerancia - Respeto - Inclusión - Derechos - Códigos.
Me gusta mucho el giro final del micro. Un abrazo.
ResponderEliminarSechat, a veces es difícil hacer un buen relato y que sorprenda teniendo que utilizar las cinco palabras que nos dan. Si lo he conseguido ya me siento muy contenta.
EliminarMuchas gracias por tu comentario.
Besos apretados.
Muy ocurrente y simpático Pilar. Felicidades.
ResponderEliminarBesicos muchos.
¡Qué bien que te ha gustado, Nani!
EliminarMuchas gracias por pasar y comentar.
Besos apretados.
Todo se puede ir al traste en un momento.
ResponderEliminarBuen relato, Pilar.
Abrazos
Así es, Ángel. Hay errores que lo cambian todo.
EliminarMuchas gracias por tus palabras.
Besos muy apretados, amigo.