viernes, 7 de septiembre de 2018

SUEÑOS



Tenía 70 años y un gran sueño. Tras mucho entrenamiento, y antes de que sus fuerzas o su cabeza le fallasen, decidió salir a buscarlo. Atrás quedó su pequeño pueblo, su familia y su hogar. Comenzó su viaje pedaleando, con su gorra de siempre, cargado con su mochila y su rueda de recambio sobre su espalda. Lo tenía todo previsto. No quería que un problema técnico acabara con su aventura antes de tiempo. 

De pueblo en pueblo, avanzaba a un ritmo lento pero constante. El cansancio comenzó a hacer mella en sus piernas, aunque su corazón le dio alas para seguir. 

Sus viejos ojos descubrieron al fondo la gran ciudad. La Torre Eiffel lo saludaba a lo lejos. El Arco del Triunfo lo esperaba a su llegada. ¡Lo había logrado! Se sintió como el ganador del Tour de Francia desfilando por Los Campos Elíseos. 

Celebró su triunfo con los brazos levantados mirando al cielo. De repente la vio. Allí estaba ella. Una gigantesca rueda de bicicleta que elevaba a las alturas a las personas. Parecía que volaban. 

Sintió cómo en su interior nacía un nuevo sueño…



Relato presentado al concurso #historiasdebicis




2 comentarios:

  1. La bicicleta, ese objeto, medio de transporte, o como queramos considerarlo, lleno de magia, que has reflejado muy bien.
    Un abrazo y suerte, Pilar

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    1. Esa bicicleta que le acompaña a perseguir sueños...
      ¡Muchas gracias, Ángel, por tus palabras y por tus buenos deseos!
      Besos muy apretados, amigo.

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