Cada latido, cada silencio
que fluye por mis venas,
es por ti, corazón.
Destino y origen
de mis versos,
el horizonte de su vuelo.
Cada noche, cada añoranza
que me hace estremecer,
lleva tu nombre.
Foto de Coline Haslé en Unsplash
Cada latido, cada silencio
que fluye por mis venas,
es por ti, corazón.
Destino y origen
de mis versos,
el horizonte de su vuelo.
Cada noche, cada añoranza
que me hace estremecer,
lleva tu nombre.
Añoranza en vena. amiga. Qué tendrá la distancia...
ResponderEliminarUn abrazo, y feliz noche
Muchísimas gracias, Albada!
EliminarBesos apretados.