sábado, 30 de septiembre de 2017

INTERFERENCIA


Lo diseñaron con cuidado dotándolo de la máxima inteligencia. Todo en él era tecnología punta. No había lugar para los sentimientos en un espacio tan aséptico y frío. 

Era un edificio cuadrado, con aburridas paredes blancas. Lo insonorizaron para que nada lo perturbara ni lo distrajese del objetivo para el que fue creado. Solo abrieron dos ventanas redondas en la fachada principal. Parecían dos ojos inexpresivos, sin vida, siempre vigilantes, para velar por su seguridad.

Pero aquel día sucedió algo inesperado…

Desapareció la frialdad en su mirada cuando, ella le sonrió con el rojo de su falda, se produjo una interferencia que despertó su sensibilidad.


Fotografía: Daniel Rueda.

6 comentarios:

  1. Precioso texto para acompañar a la imagen. Felicidades.
    Un abrazo.

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    1. Cuanto te agradezco tus palabras. Muchas gracias, Rafael.
      Besos apretados.

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  2. A veces se necesita una "ella" para que aflore la sensibilidad.
    Hermoso relato, Pilar.
    Un abrazo grande

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    1. Cuando se produce el contacto personal la tecnología pierde sentido.
      Muchas gracias, Ángel, por pasar por mi rincón y dejarme tu comentario.
      Besos apretados, amigo.

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  3. Para el que es frío, serio y aséptico no hay nada más desconcertante que encontrar a un ser feliz.
    Enhorabuena por el relato

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    1. Paola, la mejor arma contra la frialdad es una cálida sonrisa.
      Muchísimas gracias por pasar y dejarme tu comentario.
      Besos apretados.

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