Pero a vecese ese dolor es el que nos aferra a la vida, y por eso no queremos dejarlo escapar. Un besazo.
A veces, si duele demasiado, es mejor abrirle la puerta.Mucho besos apretados, Rebeca.
Pero a vecese ese dolor es el que nos aferra a la vida, y por eso no queremos dejarlo escapar.
ResponderEliminarUn besazo.
A veces, si duele demasiado, es mejor abrirle la puerta.
EliminarMucho besos apretados, Rebeca.