Cuando bosteza el amanecer,
despierto a un suspiro de tu boca,
al borde de la trémula caricia
que con el vaivén de tu pecho asoma
meciendo a tu corazón.
Despierto con cada latido
de tu corazón desnudo de malicia.
Despiertan los sueños que tu calor evocan,
más allá de la razón
que el roce de nuestra piel provoca.
La mañana florece de sol
desvaneciendo las sombras al alba
anidan mis suspiros en tus labios,
tus besos acallan mis palabras.
Entre tus brazos ahuyento mis miedos.
Se desvanecen los sueños sobre la almohada,
aguardan trenzando silencios
para, al llegar la madrugada,
desvanecerse al susurrar el viento
revoloteando sobre mi espalda.
Desnudar a la vez la madrugada,
las sonrisas cubiertas de besos
cuando la piel cansada suspira.
Las sonrisas acallan los miedos
y las primeras luces regresan.
Vestidos con el calor del alma,
bajo la almohada, los sueños
sonríen esperando otra oportunidad
para escapar al primer destello
cuando suspira el alba.
Poema seleccionado en la Antología de Poesía Hispanoamericana Contemporánea
"Y LO DEMÁS ES SILENCIO".
Muchas felicidades Pilar, es muy bonito. Me alegro mucho.
ResponderEliminarBesicos muchos.
Cuanto me alegro que te haya gustado. Lo más hermoso es compartir antología con tantos amigos.
Eliminar¡Muchísimas gracias, Nani!
Besos apretados.
Felicidades, Pilar! El poema vale la pena, es buenísimo!
ResponderEliminar¡Mil gracias, Theo!
EliminarBesos apretados.