martes, 18 de octubre de 2016

REGRESAR


    Cuando se prendieron las cortinas de la cocina, fue la voz de alarma que me dijo que algo no iba bien en casa de mamá.

     Le precedieron múltiples olvidos sin importancia, que parecían propios de la edad. Vivía sola con su independencia y su soledad. 

   Ahora, cada mañana le cuesta reconocer su casa, sus cosas que tanto cuidaba e incluso a la extraña que la mira desde el espejo y que nunca se va.

    A veces, me sonríe creyendo que soy su madre. Busca suplicante mi mirada para que la ayude a no olvidar, para regresar…


(relato enviado a Relatos en Cadena - SER 2ª semana Octubre)

2 comentarios:

  1. Hermoso, Pilar, y muy emotivo. Emana una tristeza sin paliativos ese camino hacia el olvido.

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    1. Muchas gracias amiga! Es una crueldad andar ese camino hacia el olvido y sin saber como regresar...
      Besos apretados!

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